Continuamos con el análisis del Portal de Transparencia, del que ya hablamos acerca de su presentación y concepto. En este caso hablaremos de la facilidad de encontrar los documentos, de organizarlos, y de identificar si es realmente lo que está buscando de manera fácil y sencilla. La última de las partes a tratar será la búsqueda por palabras, las peticiones y la comunicación con el propio portal.
Objetivos del portal.
Cuando se abre un portal de estas características, la naturaleza el objetivo lógico es que el usuario encuentre la información que considere necesaria de la manera más «pura» posible. Es decir, a partir de los documentos y datos originales que le permitan verificar lo que desee. Por otro lado el usuario tiene sus propios objetivos:
- Encontrar los documentos que le permitan adquirir la información que necesite
- Poder localizarlos incluso sin poder ser un experto en la materia
- Poder discriminar qué documentos son pertinentes para su búsqueda o no.
- Obtener los documentos necesarios evitando los errores de identificación.
En resumen podríamos decir que se trata de poder encontrar fácilmente lo que necesitas y poder obtenerlo sin lugar a equívocos. Todo en el portal debería estar encaminado a esto. ¿Lo hace?
La arquitectura
Dado que la cantidad de documentos y datos disponibles son los que son y están definidos por la ley, lo que debemos saber es si la navegación permite encontrar los datos. Para ello recurrimos a cómo están organizados los documentos disponibles: ¿permiten encontrarlos? En primer lugar tenemos tres bloques de información según su naturaleza:
- Institucional
- Económica
- Normativa
Por un lado podría parecer lógica, aunque cualquier estudioso del derecho o de la ciencia política encontraría separaciones ficticias que pueden complicar la comprensión del esquema. Por ejemplo: ¿la nómina de los cargos directivos, es institucional o es económica? ¿Es legítimo entender el Real Decreto que regula determinados cargos considerarlo como algo normativo o como algo institucional? Y esto son sólo dos simples ejemplos. Esto podría parecer simple, pero realmente afecta a la búsqueda de esos datos. ¿podríamos saber cómo afecta a la navegación?
Como señalamos en el post anterior, la simplicidad del portal (en la que prima esta clasificación) es un punto positivo para el portal. Sin embargo, ¿podría tener una clasificación más clara? ¿Quizá unas búsquedas más populares? Todo esto debería facilitar la búsqueda.
La cuestión es que para una primera búsqueda, lo que hacemos es seleccionar primero el tipo de información más concreto (una vez hayamos elegido a qué tipo de información queremos acceder) y luego el organismo.
De esta manera, tenemos que hacer en tres pasos una selección que podríamos hacer en una sola pantalla. Personalmente, aunque sea muy favorable al diseño minimalista, dar tres pasos en la navegación para una simple selección. En su favor debemos decir que el apoyo de gráficos podría ser útil, pero claro, ¿qué simbolo representa funciones? Aquí se selecciona una rueda dentada, pero realmente, es más un elemento estético que intuitivo. También encontramos las primeras redundancias de la tipología de la que hablamos (por ejemplo, que tengamos que al entrar en institucional encontremos un apartado de Normativa destacada habiendo otra categoría entera de normativa específicamente, no es muy alentador). Una vez seleccionada la categoría que nos interesa llegamos a la elección de órgano. Esto tiene un problema, y es que la descripción de qué información específica
(por ejemplo, Curriculum, que por cierto, el plural va sin «s» al final), solo sabes qué es cuando ya lo has seleccionado y pulsando el enlace que extiende la línea de texto que lo define. En algunos cosas (por ejemplo, funciones) te dirige a la página del BOE, lo que tiene, a parte de un impacto identitario (te saca a otra página para darte información), genera problemas adicionales. ¿Es el sistema capaz de integrar en las búsquedas este tipo de informaciones cuya descripción, datos y mantenimientos no recaen en el portal?
Si entramos a navegar nos encontramos con una página de resultados con un menú lateral que permite filtrar la búsqueda según el tipo de documento o el órgano al que pertenece. Esto, en términos de diseño es muy acertado porque permite ir viendo la colección de documentos e informaciones disponibles conforme vamos haciendo selecciones.
Sin embargo aquí encontramos el principal problema del portal: las jerarquías están hechas a dos niveles máximo: las dos categorías de las que hemos hablado, y el ministerio al que corresponden. De esta manera, la capacidad de filtrar datos o documentos se ve limitad de manera drastica. No es posible ni filtrar demasiado, ni poder hacer búsquedas muy transversales (por ejemplo, buscar los contratos menores de las direcciones generales de tre ministerios distintos). No hay de filtrado adicional (salvo uno por fechas, escondido abajo a la izquierda, cuando se supone que ya has buscado y filtrar es lo que más te interesa) ni (y esto es más grave) de ordenación. Si, por ejemplo, buscas el CV de un alto cargo del gobierno y la Case Real, aparece primero Margallo (que además tiene el nombre en mayúsculas). Dado que son 47 páginas de resultados, la penosidad de la tarea es grande.
Es decir, la navegación nos está diciendo que espera que te interese información a un nivel de detalle relativamente alto, en el momento presente y agrupada a nivel de ministerios. Si buscas alguna colección de documentos (por ejemplo, contratos publicitarios de todos los ministerios para el año 2014), la búsqueda de documentos recae directamente en el usuario.
Presentación de los resultados.
Como decíamos, el modelo de metadatos de la información es de un nivel muy elevado. Esto hace que cualquier elemento de clasificación, información o visualización del documento sea muy limitada. Para ello podemos ver dos ejemplos.
En la búsqueda de un contrato, a parte de no poder filtrar el tipo de contrato, no podemos saber la sutación en la que se encuentra el mismo. Es decir, para poder averiguarlo, tienes que ir a la página o portal que recoge la información (cuando no es un PDF plano). Como ya hemos comentado varias veces, la obsesión de las administraciones públicas por los PDF’s para presentar información no es lo mejor ni para la web, ni para los usuarios. Otro caso es el listado de los sueldos de los altos cargos. Por un lado el dato aparece agregado en total, sin desglosar elementos como el sueldo base, o la antigüedad. Efectivamente aparece una columna T con números que da que pensar que son trienios, pero que sólo podemos suponer, porque no hay leyenda. A esto hay que sumar que la información no es completa (por ejemplo, los cargos en el exterior tienen unos módulos que permiten igualar su nivel de vida al de su destino que no se refleja en la información de nóminas y que, además, no se avisa ni de su existencia ni de su no publicación).
Por otro lado, en este caso de los sueldos es encomiable que se presente en un listado (aunque no ordenable) que permita, al menos, copiando y pegando, crear un excel para poder comparar.
Conclusiones.
En resumidas cuentas podemos señalar que el diseño del portal no es del todo malo. De hecho, en cuanto a imagen no está mal, y algunos aspectos de navegación son más que interesantes. Sería muy de agradecer la simplificación en pasos para obtener resultados (4 páginas), y la integración de la mayoría de ellos en la estética del portal. Por otro lado, debido a la naturaleza compleja de mucha de esta información, y la vocación abierta de la transparencia, sería muy bueno simplificar y clarificar las categorías para todo el público, así como poner las explicaciones en lugares más visibles y cuando son útiles.
El punto más flojo, sin embargo, es la capacidad de encontrar la información de manera clara y rápida dentro de unos niveles de agregación tan altos, así como la falta de elementos de navegación que lo faciliten. En mi opinión, (y no tengo contacto con nadie acerca del tema), da la sensación de que, aunque el portal tiene una vocación de ser transparente (con sus limitaciones), su capacidad de obtener datos y metadatos de manera lo bastante clara y ordenada para poder trasladarlos al portal no exsite, o, desde luego, no es suficiente para ser operativa. O no piden más detalle, o no lo reciben, y eso hace innecesario hacer cualquier otro elemento de clasificación… Dan lo que tienen, pero lo que tienen dista mucho de ser transparente. Esa transparencia, al menos en este aspecto, recae en el usuario, que tendrá que dedicar horas en buscar, ordenar y clasificar una información que ya está localizada, ordenada y clasificada.
1 comentario en «El Portal de Transparencia (II): Navegación»
[…] su presentación general (que es un tanto deficiente, y poco clara, aunque moderna y simple) y su arquitectura de datos (poco ambiciosa, lo que limita la localización y clasificación de información). Queda una […]